Marzo huele a pólvora y a fallas

Cuando un valenciano/a escucha la palabra marzo, lo primero que se le viene a la mente son las fallas y estas huelen pólvora y tradición.

Como buenos valencianos/as que somos, desde la fundación creamos en 1999 nuestra propia comisión, la cual ha ido creciendo cada año y con ella también los actos, pues en la actualidad disponemos de una programación fallera en toda regla y bien amplia, pues como en todas las comisiones es tradición, empezamos los actos con la demaná a nuestra reina de la falla, siendo este año la máxima representante de la comisión Yolanda Prieto, acompañado por nuestro carismático presidente Ubaldo Balbastre.

También contamos con el acto de proclamación, albaes y como no con nuestro gran día fallero, que es lo más esperado por todos/as y cada uno de nuestros chicos y chicas, pues es un día pensado para disfrutar, tanto los miembros de la comisión, como el resto de componentes de la fundación.

Empezamos el día como bien toca con la despertá, para luego dar paso a la planta de nuestro monumento, que vamos creando durante semanas con mucha ilusión, para posteriormente quemarlo en la tradicional cremá, aunque nos de mucha pena, pues siempre se nos sale alguna lagrima que otra.

Nuestra comisión se viste con sus mejores galas, para dar paso a la presentación de la corte, reinas y acompañantes, que luego son acompañados por todos nosotros/as en el tradicional pasacalle por las calles de nuestro barrio, para llegar a la iglesia de san José y realizar nuestra tradicional ofrenda.

Y como bien sabéis, luego realizamos nuestra famosa globotá, en esta ocasión hemos querido representar y hacer homenaje a la señera, símbolo de valencia y como no de nuestras queridas y amadas fallas.

Marzo es un mes muy esperado para nuestros chicos y chicas, pues en Espurna nos encantan las fallas. Por eso, como ya es tradición, desde 1999 que creamos nuestra propia comisión celebramos las fallas por todo lo alto con diferentes actos en nuestro tradicional día fallero. Este día es de lo más completo, pues empezamos con una despertá para calentar motores, continuando con la planta de nuestro monumento que creamos con mucho cariño y así dar paso a la presentación de nuestros máximos representantes, para finalizar con la cremá de la falla. Pero esto no ha hecho más que empezar, pues continuamos el día con pasacalle, ofrenda y para culminar la globotá, y para recargar pilas los padres de nuestros chicos nos deleitan con nuestras tradicionales paellas amenizadas con una verbena.